jueves, 11 de febrero de 2010

En realidad la perfecta simetria no existe

Engañada, decepcionada, desilusionada, defraudada, descorazonada, timada, mentira, estafada y desorientada.

Siempre que me ha pasado algo malo con alguna persona la respuesta ha sido un fácil "quien siembra recoge", yo sembraba -erraba-, y me hacian recoger lo que me merecía. Hacía daño a una persona y esa persona me lo devolvía, se supone que eso es lo justo, ¿no?

"¿Que he hecho yo para merecer esto?" es una pregunta muy típica y algo melodramática, pero en este caso no es falsa. Me han hecho daño aun habiéndome roto por ver una sonrisa en unos labios que ni siquiera eran los míos. Y esos mismos labios me han mentido y engañado, aunque por lo menos han seguido sonriendo hasta que me he enterado.
Por una vez en mi vida no he sido una egoísta y he preferido mirar por otra persona antes que por mí: amor.
Las chicas buenas no van a ninguna parte, debería de haberlo recordado.

¿Qué puedo hacer? ¿Ojo por ojo y diente por diente? No tengo porqué hacer daño yo tambien, lo que ha pasado ha pasado, ya no se puede hacer nada.
_________________________________________________________

Al acusado:

¿Mi pecado? Ser ingenua e ignorante. ¿Tu pecado? El único pecado que se te puede adjudicar es que aun sabiendo que en la realidad nada te ataba a mí te arriesgabas a hacerme daño: te dio igual. Yo en ningún momento he querido dañarte, ¿dónde se ha escondido la reciprocidad? ¿Y la sinceridad? Si quieres a alguien lo último que deseas es hacerle triste, no te escondas y da la cara, al final ha sido peor. No es lo mismo ver triste a alguien que hacer triste a alguien. A ti no te importaba hacerme triste, lo que querías es no verme triste... cobarde.
En cierto modo he recibido lo que qería, siempre dije que cada uno tiene su vida, y puede hacer con ella lo que le dé la gana "¿pero a qué precio?" a ti te gusta decir eso y ahora empiezo a entenderlo.

Mi tozudez podría compararse con algo maquiavélico, y si yo soy Maquiavelo y mi fin -que es tu sonrisa- justifica los medios -nuestros medios, los tuyos en este caso- Maquiavelo ha salido escaldado.

Odio vivir en la ignorancia, tu crimen ha sido simplemente mantenerme en ella. Es lo único denunciable, pero puedes estar tranquilo, no voy a llevarte a juicio, me has embaucado demasiado bien, enhorabuena, aunque embaucar sea una de tus especialidades.

Te felicito: al final siempre consigues lo que quieres.

No hay comentarios:

Publicar un comentario